En Gremisa, ya son varias las delegaciones que van volviendo a la normalidad, sobre todo en zonas turísticas
Nadie duda que todos están deseando volver a la normalidad anterior. Después de un año atípico, muy complicado y dominado por la incertidumbre y el miedo, el deseo de regresar a la situación de comodidad anterior en la que no se conocía la existencia del coronavirus y ni siquiera se sospechaba que se trabajaría con tantas precauciones, viviendo confinados y a merced de un toque de queda.
La llegada de esta nueva normalidad no está exenta de dificultades se espera poco a poco volver a los antiguos hábitos y asumiendo el uso de la mascarilla a corto y medio plazo, junto con todas las medidas higiénicas.
De todo ello comenta José María Amoedo, CEO de Gremisa Asistencia: «El escenario provocado por la crisis económica y social de la pandemia de la COVID-19 ha abierto nuevas ventanas con numerosos retos. La incertidumbre ante nuevas oleadas del virus será la protagonista en esta etapa y deberemos vivir con ello hasta que la Ciencia encuentre un tratamiento o vacuna definitiva contra este patógeno.
Las empresas tendremos que adaptarnos para poder mejorar la seguridad y la salud de sus empleados y clientes, y estableciendo simultáneamente rutinas que nos ayuden a vencer la ansiedad y los miedos después de los confinamientos. Permitiéndonos volver poco a poco a relacionarnos como antes de la pandemia».
«La pandemia de la Covid-19 ha cambiado muchas cosas, y ha sido el centro de toda nuestra actividad y vida durante estos meses, e incluso dejará su huella durante mucho tiempo no solo en nuestro personal, en nuestras vivencias y recuerdos, sino también en las estructuras y medidas de salud de todas nuestras oficinas».
«Ahora, hay que afrontar la etapa post-COVID, de momento intentaremos ir progresivamente cogiendo confianza a la ausencia de mascarillas en espacios abiertos. Y continuar con su uso hasta que las autoridades sanitarias lo recomienden y la inmunidad colectiva alcance mayores índices. Este verano, se está notando un mayor aumento de siniestralidad y servicios de urgencia en las zonas habitualmente turísticas. Ya estamos estableciendo turnos de servicios y guardias muy similares a los existentes antes de la Covid-19».
El optimismo que se vive con el incremento en la vacunación parece que augura un verano intenso y con mucha afluencia de turismo nacional, Por ello, «hemos reforzado las zonas de montaña Huesca, Cantabria y las zonas de playa; Tarragona, Palma de Mallorca, Menorca e Ibiza ofreciendo la calidad en los servicios que siempre aportamos».
Esta crisis sanitaria ha obligado a reaccionar con rapidez y adaptarse a las nuevas circunstancias que han asolado a nivel mundial. España es un país de grandes y creativos emprendedores.
Fuente Comunicae