Muchas personas han oído hablar de un destino turístico ubicado en la Costa Azahar, que se caracteriza por un castillo medieval, un casco histórico empedrado, largas playas de arena fina y más de 300 días de sol al año. Se trata de Peñíscola, la Ciudad del Mar que este verano vuelve a estar de moda para quienes pretenden pasar unas vacaciones familiares idílicas en este lugar de ensueño.
Esta «joya del Mediterráneo» es uno de los destinos que más atrae a las familias, no solo por su belleza y su rica historia, con su majestuoso Castillo y casco histórico sobre un peñón, sino también por su amplia variedad de actividades especialmente diseñadas para los más pequeños.
Una de las mejores opciones de hospedaje en la Ciudad del Mar es el Gran Hotel Peñíscola, gracias a sus múltiples servicios y su ambiente familiar. Con una amplia gama de prestaciones para sus huéspedes, cada detalle está diseñado para crear experiencias inolvidables y ofrecer mucho más que un alojamiento de calidad.
En el blog del establecimiento hotelero es posible conocer todas las actividades que se pueden hacer en Peñíscola, al igual que los numerosos planes de diversión para realizar en familia. En ese sentido, los más pequeños tienen la posibilidad de disfrutar un sinfín de opciones en el Funny Club, mientras que los adultos se pueden relajar en el Gran Wellness SPA con una extensa lista de tratamientos, masajes o en el circuito de aguas.
Además, la animación nocturna y la música en vivo garantizan un entretenimiento apto para todos los gustos y edades. En cuanto a sus instalaciones, cabe destacar que el hotel ofrece un amplio buffet que combina lo mejor de la gastronomía local e internacional.
A su vez, dispone de una cafetería y un bar en la piscina con una vasta carta de cocktails para degustar durante las noches de verano, mientras se siente la brisa marina al compás de una buena música o de un espectáculo en directo.
En un mundo donde la sostenibilidad es cada vez más importante, el Gran Hotel Peñíscola asume el camino del compromiso con el medioambiente. Más del 90% de la energía que consume el alojamiento durante el día es generada por paneles solares del propio establecimiento, lo que contribuye así a la conservación del entorno medioambiental y al desarrollo de un turismo más responsable.
A solo 30 kilómetros de Peñíscola, Alcossebre es otro de los destinos perfectos. Con su combinación única de playa y montaña, este encantador pueblo no tiene nada que envidiar a las idílicas Islas Baleares.
Conectado a Peñíscola por la espectacular Sierra d’Irta, Alcossebre invita a explorar sus playas y calas de ensueño. En este marco, desde el Gran Hotel Peñíscola recomiendan algunos de los mejores alojamientos para quienes deseen visitar Alcossebre como el Hotel Alcossebre, Alcossebre Sea Experience (galardonado como uno de los mejores 10 apartahoteles de la comunidad valenciana) y la inmobiliaria de apartamentos en alquiler Casa Azahar.
