El mes de marzo ha cerrado con un total de 846.478,23 toneladas de aceite de oliva en España, de las que el 68% (574.075 toneladas) se han producido en Andalucía, según el avance de la situación de mercado del sector del aceite de oliva, aceituna de mesa y aceite de orujo de la Agencia de Información y Control Alimentarios (AICA), consultado por Europa Press.
Los datos de la AICA correspondientes a marzo apuntan a una producción de 14.280 toneladas ese mes; y de 846.178 toneladas de aceite de oliva acumuladas. En total, las existencias se sitúan en 659.285,34 toneladas, de las cuales 470.913 se encuentran en manos de las cooperativas y almazaras; 184.870 están en poder de los envasadores; y 3.501 están en el Patrimonio Comunal Olivarero.
Con estos datos, el secretario general de UPA-Andalucía y responsable de la sectorial de olivar y aceite de UPA, Cristóbal Cano, ha advertido en un comunicado de que «el ritmo de salidas en los próximos meses tenderá a ralentizarse porque no hay aceite para mantener este camino» y ha lamentado la «ilógica» bajada de precio en origen del aceite de oliva.
«A la luz de los magníficos datos de marzo, no es lógico ni razonable la acusada disminución de los precios en origen del aceite de oliva, motivado sobre todo por un cambio de ánimo en el sector olivarero. El consumo se mantiene firme. Eso es lo que nos dicen las ventas de otras 91.000 toneladas más de aceite justo a la mitad de la campaña de comercialización», ha explicado.
Así, ha señalado que existe una baja disponibilidad de aceite, las lluvias registradas han sido buenas pero que encaminan hacia una próxima cosecha media. «Esto –según ha apuntado–, junto a si la demanda se mantiene fuerte como hasta ahora puede dar provocar tensiones en los mercados debido a la poca disponibilidad de aceite en España y el resto del mundo, y al inesperado cambio en los precios», afirma.
De esta manera, Cano confía en que las lluvias continúen en la primavera, aunque para este mes de abril, a medio plazo, no se atisban precipitaciones, y, sobre todo, que las elevas temperaturas no causen daño en la floración como ocurriera el año pasado.
«Según vayan pasando los meses, antes o después, ese nivel de comercialización será necesariamente menor porque hay poco aceite y podría darse un escenario de desajustes en los mercados que no son buenos para nadie», ha insistido para señalar que «la situación de precios en origen para los próximos meses debe pasar por una reversión de esta ilógica bajada actual y volver a la estabilidad que teníamos».