La tecnología juega un papel fundamental en el mundo de la automoción. Los fabricantes cada vez ponen a la venta coches más seguros y cargados de tecnología, con gran protagonismo de los sistemas de asistencia a la conducción y de la conectividad.
Sin embargo, gran parte de los conductores, no creen que estos vehículos cargados de tecnologías sean la solución para reducir la siniestralidad en las carreteras.
Según el estudio sobre “La red viaria, el mantenimiento del vehículo y la conducción” elaborado por el fabricante de neumáticos Continental, con la participación del Comisariado Europeo del Automóvil (CEA), pone de manifiesto que “sólo el 31,1% de los entrevistados opina que los coches con más seguridad y tecnología, permitirán bajar el número de accidentes frente a un 68,9% que cree que la clave está en una conducción responsable y en el cumplimiento de las normas”.
La encuesta, realizada a los socios de CEA, también muestra que un 61,2% está a favor de las subvenciones de las administraciones para comprar un coche nuevo como solución para reducir la siniestralidad y, ayudar a una menor contaminación atmosférica. Según opinan estos conductores, las ayudas a la compra propician que la gente compre y circule con coches tecnológicos más seguros.
En relación al mantenimiento del vehículo y a la normativa sobre los neumáticos, un 30,8% cree que la ley que especifica la profundidad mínima de desgaste del dibujo del neumático debería ser más exigente y ampliar los 1,6 milímetros estipulados en la actualidad. En contra se posiciona un 50,2% para quien circular con neumáticos con una profundidad de 1,6 milímetros es todavía seguro. Un neumático recién salido de fábrica tiene una profundidad de dibujo aproximada de 8 milímetros.
Esta encuesta se enmarca dentro del proyecto VisionZero en la que Continental, como fabricante de neumáticos y tecnologías, está inmerso para lograr el reto de cero accidentes, cero muertes y cero lesiones de tráfico.