Los principales directivos de Telefónica, Deutsche Telekom, Orange y Vodafone han aprovechado este lunes el escenario del Mobile World Congress (MWC) para pedir a la Unión Europea (UE) cambios en materia de competencia en el sector de las telecomunicaciones para poder hacer frente a los retos de inversión de los próximos años y también para ganar mayor escala.
«Somos la última esperanza de Europa en materia de tecnología. Tenemos que ser capaces de poder hacer nuestro trabajo. Tenemos que afrontar una brecha de inversión de 200.000 millones de euros, y podemos hacerlo, pero algo va mal y es necesario arreglarlo. Necesitamos un nuevo régimen regulador», ha destacado en su intervención el presidente de Telefónica, José María Álvarez-Pallete.
Por su parte, el consejero delegado de Deutsche Telekom, Tim Hoettges, ha hecho hincapié en la pérdida de rentabilidad por parte de muchas de las operadoras europeas.
«¿Pueden decirme cómo las empresas pueden invertir en infraestructuras futuras si no ganan el dinero de vuelta? ¿Quién diablos está dando dinero a estas empresas para las inversiones futuras que son tan desesperadamente necesarias en ese continente?», se ha preguntado el directivo germano.
En ese contexto, ha lamentado las dificultades con las que se topan las telecos europeas a la hora de realizar consolidaciones en el sector debido a la regulación de la UE en materia de competencia.
Así, ha señalado que Europa se está «quedando atrás» en comparación con otros mercados como el estadounidense o el chino, donde el volumen de operadores relevantes es mucho más reducido que los en torno a 45 que hay en la UE.
«También podemos consolidar (el sector) y hacer lo mismo que pasó en China, con tres o cuatro operadores, o en los Estados Unidos (…) Así podríamos crear economías de escala. El problema es que no podemos aumentar los precios. El problema es que nuestros costes de capital son muy difíciles de recuperar. Y encima de eso, no tenemos manera de hacer una consolidación», ha añadido.
En la misma línea, la consejera delegada del grupo Vodafone, Margherita Della Valle, ha insistido en que el sector de las telecomunicaciones en la UE cuenta con 27 regulaciones distintas, lo cual genera, a su juicio, una fragmentación del mercado que afecta de forma negativa al sector.
«Deberíamos despertar y ver que el ecosistema en China es de 1.500 millones de personas, en India de 1.400 millones, el ecosistema en los Estados Unidos es de 330 millones y Europa debería ser un mercado de 500 millones, y no fracciones de 50 aquí, 30 allí y 80 allí», ha lamentado.
En ese sentido, también ha criticado la falta de armonización en la UE en torno a las subastas de espectro radioeléctrico. «Son 27 regulaciones diferentes más la regulación europea», ha remachado.
Por su parte, la consejera delegada del grupo Orange, Christel Heydemann, ha argumentado el papel que juegan las telecos en la sostenibilidad y eficiencia de las redes y ha defendido las inversiones que realizan las compañías del sector para optimizar su eficiencia energética.