Para veterinarios y expertos en perros, cada animal es un universo diferente, lo que implica tener en cuenta reglas de educación que se adapten a su raza y personalidad, desde un lugar que le proporcione calma y felicidad al animal.
Es por esto que existen herramientas como el adiestramiento que regulan el comportamiento y facilitan el aprendizaje en las mascotas, lo que en el largo plazo favorece la armonía en el hogar y mejora sustancialmente la vida de todos sus miembros.
Tal ha sido el auge de estas herramientas, que las personas se inclinan cada vez más por acudir a un adiestrador, lo que ha permitido que esta disciplina tome fuerza y se aumente el número de personas que ven en esta profesión una salida para fraguar su proyecto de vida. Es por esto que centros como Monte Ida ofrecen programas de formación en adiestramiento canino, con los que consiguen que sus estudiantes sean capaces de ayudar a las familias a comunicarse con su mascota, enseñarle a comportarse de manera adecuada o solucionar problemas de conducta que ya hayan aparecido, lo que supone una vida tranquila y en armonía de los propietarios junto a sus perros.
Este programa de capacitación en adiestramiento canino está acreditado por la Asociación Nacional de Adiestradores Caninos Profesionales y adaptado al Certificado Profesional, lo que le permite a sus alumnos trabajar en residencia y centros de Adiestramiento o iniciar y consolidar su propio proyecto de cuidado y entrenamiento para perros. La escuela de adiestramiento Monte Ida está inscrita en el registros oficial de la Comunidad de Madrid y cuenta con grupo de trabajo colaborador de la Real Sociedad Canina de España, lo que le ha permitido liderar la oferta educativa en programas similares y ser, desde hace tiempo, la escuela referente para la formación de nuevos adiestradores.
Desde las primeras sesiones de clase, los alumnos tendrán que enfrentarse a grupos de trabajo con animales, donde van a aprender las herramientas y tácticas para convertirse en guías, adiestradores e instructores, teniendo en cuenta las características genéticas y comportamentales de cada individuo. Durante las clases, se comparten ejercicios de obediencia básica, enfocados, principalmente, al control del perro, sobre todo en los primeros encuentros. Seguido de esto, se le enseña a los alumnos otras herramientas para enseñar al perro a aprender ejercicios más complicados y aplicar los conocimientos aprendidos en grupos de perros con diferentes características, desde cachorros o principiantes, hasta perros ya adiestrados que necesitan enfrentarse a pruebas de utilidad o mantener la operatividad en algunas labores o tareas puntuales.
Monte Ida cuenta con un grupo de docentes, instructores y adiestradores especializados, con quienes sus alumnos trabajen mano a mano durante todo su periodo formativo. Además, según nos cuenta Israel Zamorano, director de la escuela, una vez que los alumnos terminan su formación y reciben la titulación que les permite comenzar a trabajar, siguen estando acompañados por sus instructores, con el fin de seguir ayudandoles el tiempo que necesiten, para que puedan conseguir vivir de su pasión, el Adiestramiento de perros. Además, derivan parte de los clientes que reclaman sus servicios a alumnos que han estudiado en la Escuela, lo que supone un empujón importante para el comienzo de sus carreras profesionales.
Con este programa, la escuela Monte Ida está contribuyendo a la profesionalización del sector, proporcionando herramientas innovadoras y efectivas que permitan a los futuros adiestradores desarrollar su vida profesional de una manera rentable y estable, siempre teniendo en cuenta la ética profesional y el respeto a los animales.
