La bicicleta y el patinete, economía real y sostenible

Por Redacción

Más de 700.000 personas de toda España se han incorporado al uso de la bicicleta y más de 370.000 personas se han iniciado con el patinete durante la pandemia de la Covid-19 y en un contexto de baja movilidad por las restricciones para frenar el avance de la enfermedad.

Así se desprende del estudio ‘La bicicleta y el patinete en tiempos de pandemia en las zonas urbanas españolas’, realizado por la Red de Ciudades por la Bicicleta (RCxB), a través de Gesop, y presentado este martes en el Congreso Nacional de Medio Ambiente (Conama), celebrado en Ifema (Madrid).

Respecto al género de los usuarios, el informe indica que en este último año se ha pasado de un 63% de usuarios hombres a un 60,1% y de un 37% de usuarias mujeres a casi un 40%. Además, durante la pandemia, el uso del patinete ha crecido entre las mujeres.

Por área geográfica, la investigación señala que los usuarios de la bicicleta se reparten de forma más homogénea en todo el país, tanto en ciudades grandes como pequeñas, mientras que los de patinete se concentran mayoritariamente en las grandes ciudades, y todavía más entre los que se han incorporado más recientemente.

En este sentido, más del 80% de los nuevos usuarios de patinete está en las ciudades de más de 100.000 habitantes. En concreto, el 36,9% de los nuevos usuarios de patinete se encuentran el ciudades de 100.000 a 500.000 habitantes, y el 43,6% de los nuevos usuarios se concentran en ciudades de más de 500.000 habitantes.

Según se desprende de esta encuesta, los usuarios de la bicicleta asignan a este medio de transporte más usos que al patinete. Un 25% de ellos la han utilizado para ir a trabajar o al centro de estudios, una cifra que baja al 22,4% en el caso de los nuevos usuarios. Por otro lado, un 34,3% de los usuarios de la bicicleta indican que la usan regularmente para hacer desplazamientos cotidianos. No obstante, la mitad o más de los ciclistas dicen utilizar la bicicleta para pasear (50,6%) o hacer deporte (55,6%).

Por su parte, el uso del patinete está más ligado a la movilidad obligada. En general, un 29,8% de los usuarios que han utilizado el patinete durante la pandemia lo han hecho para ir a trabajar o al centro de estudios, un 34,3% en el caso de los nuevos usuarios. Además, un 58,4% de los usuarios de patinete indica que lo usa para hacer desplazamientos cotidianos. En el caso de los nuevos usuarios, esta cifra supone el 46,7%. Finalmente, un 29,6% de los usuarios de patinete lo usan para ir a pasear, siendo esta cifra el 18,2% en el caso de los nuevos usuarios.

El estudio también revela que un 31,2% de los nuevos usuarios han cambiado el vehículo motorizado por la bicicleta y un 41,5% de los nuevos usuarios de bicicleta ha cambiado el caminar por el ir en bicicleta. En el caso del patinete, el 33,9% de los nuevos usuarios del patinete lo ha cambiado por caminar y el 40,2% ha optado por el patinete frente al transporte público.

INFRAESTRUCTURAS PARA LAS BICICLETAS

Sobre las infraestructuras para bicis, el informe desvela que en las ciudades de más de 500.000 habitantes un 70,5% de los usuarios considera que están muy o bastante preparadas; un 54,1%, en el caso de las ciudades de 100.000 a 500.000 habitantes; y menos de un 50%, en el resto de ciudades de menor tamaño.

Sin embargo, las infraestructuras se perciben menos preparadas para los patinetes. Así, un 40% de los usuarios de patinete indica que las infraestructuras están muy o bastante bien para el patinete, frente al casi 60% restante que indica que están poco o nada bien.

Según los autores del estudio, más de 2 millones de personas se plantean utilizar la bici a lo largo del próximo año y casi 1 millón y medio se plantea el uso del patinete. De los más de 20 millones de personas que hay en España entre 16 y 65 años en municipios a partir de 25.000 habitantes, más de 2,3 millones (10,9%) se plantean utilizar la bicicleta el próximo año, y cerca de 1,5 millones (7%) optar por el patinete.

Por regiones, el informe detalla que estos potenciales usuarios se concentran, sobre todo, en las ciudades de más de 100.000 habitantes: Madrid, Cataluña, Comunidad Valenciana y Andalucía son las comunidades donde la bicicleta y el patinete despiertan mayor interés.

Por otro lado, entre las personas que han usado la bicicleta durante la pandemia, un 79,5% confirma que seguro que la seguirá utilizando tras la Covid-19 y un 17,5% dice que probablemente. En el caso del patinete, un 72,7% expone que seguro y un 24,1% indica que probablemente.

La presentación del estudio ha corrido a cargo del presidente de (RCxB) y vicepresidente de Movilidad, Transporte y Sostenibilidad del AMB, Antoni Poveda, y la directora de GESOP, Àngels Pont. El acto también ha contado con la asistencia del director del Observatorio Nacional de Seguridad Vial de la DGT, Álvaro Gómez.

«El estudio nos ha revelado que, en un marco general de baja movilidad a consecuencia de la pandemia causada por la Covid-19, muchas personas se han acercado al uso de la bicicleta y el patinete, especialmente en las grandes ciudades. Han surgido miles de nuevos usuarios. Otros se lo han planteado y muchos piensan que lo utilizaran en el futuro. En este sentido, también hemos descubierto que tenemos más de 2 millones de futuros usuarios potenciales», ha dicho Poveda.

«Estos resultados que hoy presentamos nos confirman que, todas administraciones, instituciones y asociaciones, con consenso e independientemente del color político, debemos seguir mejorando e incrementando las políticas a favor de la bicicleta, para convertirla en un verdadero medio de transporte diario. Ante el crecimiento de su uso, es nuestra obligación seguir mejorando y ampliando las infraestructuras y los servicios. Era una necesidad ya antes de la pandemia y ésta solo ha hecho que acelerarla y ratificarla. Favorecerá a los usuarios habituales y facilitará su uso entre los nuevos usuarios y, sobre todo, entre los potenciales», ha añadido Poveda.

En este estudio se han realizado 1.500 encuestas telefónicas durante el mes de abril del 2021 a población de entre 16 y 65 años residente en municipios de más de 25.000 habitantes.