Cualquier etapa de la vida es la correcta para animarse a incursionar en las Bellas Artes. En los más pequeños funciona como un estímulo perfecto para que exploren su creatividad y desarrollen sus habilidades, mientras que en los adultos también sirve para mejorar la inteligencia y cultivar el bienestar emocional.
Es por eso que en el momento de buscar el lugar ideal para hacer clases de pintura Madrid, lo mejor es hacerlo con profesionales de primer nivel como los que ofrece Taller de la Salamandra en sus dos centros ubicados en las zonas de Nuevos Ministerios y Las Tablas, donde imparten cursos para todas las edades sobre las principales técnicas disponibles.
Desarrollar al máximo las inquietudes artísticas
La academia ofrece clases para los más pequeños y también para los adultos a través de una metodología integral que combina las últimas técnicas artísticas aplicadas a la pintura con el estilo clásico llevado a cabo por artistas de gran trascendencia nacional e internacional. Durante el curso, los alumnos descubrirán cada una de las técnicas que necesitarán para convertirse en grandes artistas, como puede ser pintar con acuarela, óleo o acrílico, así como todos los secretos para poder trabajar sobre lienzo o madera.
En Taller de la Salamandra el objetivo es que todos sus estudiantes mejoren, disfruten y que exploren sus aptitudes artísticas de acuerdo a las palabras de Alejandro Alcázar de Velasco, el fundador de la escuela, donde también enseñan dibujo y fotografía creativa, siempre bajo la conducción de profesores licenciados en Bellas Artes y artistas en activo que ofrecerán asistencia personalizada durante todo el proceso de aprendizaje.
Hogar de grandes artistas
Con más de veinte años de experiencia en el sector educativo y cientos de colaboraciones con otras instituciones, empresas y profesionales, Taller de la Salamandra se erige como una verdadera referencia en técnicas pedagógicas para el desarrollo artístico y colabora frecuentemente con otros centros oficiales de formación de profesores para trasladar esa experiencia a maestros de primaria y secundaria. Además, muchos de sus docentes también trabajan en el ámbito universitario o incluso en otras actividades en torno al arte contemporáneo, como la gestión y el comisariado de exposiciones.
La escuela también dicta cursos monográficos intensivos sobre temas específicos que van desde la teoría del arte, ilustración y grabado hasta paisaje o fotografía para artistas plásticos, entre muchos otros temas, con la intención de que el alumno puede disfrutar de un aprendizaje flexible y adaptado a sus inquietudes personales.
Cada clase dura 2 horas y se puede optar por abonar una mensualidad o incluso pagar el trimestre entero, aunque para los que están más complicados con los horarios existe la posibilidad de comprar bonos, los cuales le permitirán programar con mayor flexibilidad sus clases y administrarlas a su propio ritmo.