La torta de San Blas (San Blas opilak, en vasco) es una preparación tradicional de las pastelerías guipuzcoanas que suele ofrecerse a finales de enero y principios de febrero. Es decir, cerca del día de San Blas, que se celebra cada 3 de febrero. En particular, la tradición indica que este santo protege contra los males de garganta, por eso antes de ser ingeridas estas tortas eran bendecidas. Esto se relaciona con la historia mítica de Blas, un obispo y médico armenio que lograba curaciones milagrosas.
Actualmente, una de las mejores versiones de este producto es la que ofrece Pastelería Oiartzun. Esta empresa elabora tortas de San Blas en su obrador abierto al público que está ubicado en el camino Jai Alai 6, Gipuzkoa. Allí, el equipo liderado por el jefe de obrador David Martín Redondo prepara estar tortas con sabor a anís a partir de una receta tradicional que permite conseguir un producto jugoso y adictivo.
Las tortas de San Blas son ideales para acompañar un café
Según indica la leyenda, este plato dulce comenzó a prepararse en Eibar y desde allí se expandió a todo el territorio guipuzcoano. Lo que caracteriza a estas tortas es su sabor anisado y su cubierta de merengue blanco glaseado. Además, suelen estar decoradas con chocolate fundido que se usa para inscribir el nombre de San Blas. Por su sabor y textura, resultan ideales para acompañar un café por la tarde, aunque también se consumen como postres.
En particular, la masa de esta preparación lleva anís o su aroma. Además, la consistencia que se busca es semi dura. En cuanto a la forma, hay pasteleros que prefieren elaborarlas de manera rectangular o como rosquillas. Sin embargo, el formato más tradicional es el redondo. Esta última opción es la que escogen los especialistas de Pastelería Oiartzun.
En algunos casos, también se coloca una pizca de anís en el glaseado para reforzar el sabor. Por último, el chocolate no solo tiene fines decorativos, ya que contrasta muy bien con el sabor del glaseado.
Dulces tradicionales del País Vasco en Pastelería Oiartzun
Este local también prepara otros platos dulces tradicionales de esta región como, por ejemplo, la pantxineta. Esta tarta lleva un hojaldre 100 % de mantequilla, crema pastelera, almendras molidas y tostadas, y canela.
Otra tarta que se prepara de manera artesanal en este obrador es la Mascota, que combina bizcocho con crema de almendras y almendras tostadas. Además, Pastelería Oiartzun ofrece una deliciosa versión de la tarta Gambeta, con bizcocho, nata 100 % fresca de Soria montada y yema tostada.
La torta de San Blas de Pastelería Oiartzun es una de las más destacadas de Gipuzkoa. Así lo corroboran las reseñas y la elevada puntuación que esta empresa tiene en distintas plataformas de internet.