UE y EEUU negocian una solución a su disputa por el acero y hacer frente común a China

Por Redacción

Estados Unidos y la Unión Europea han anunciado este lunes el inicio de conversaciones para resolver sus diferencias sobre el acero y el aluminio y corregir la sobreproducción a nivel global –que achacan sobretodo a las distorsiones de China–, al tiempo que Bruselas se dispone a suspender la subida de aranceles sobre producciones estadounidenses para facilitar el entendimiento.

La representante comercial de Estados Unidos, Katherine Tai, la secretaria de Comercio de Estados Unidos, Gina M. Raimondo, y el vicepresidente ejecutivo de la Comisión Europea, Valdis Dombrovskis, anunciaron hoy el inicio de las discusiones para abordar el exceso de capacidad global de acero y aluminio.

Así, los dos bloques acordaron entablar discusiones sobre la resolución mutua de preocupaciones al respecto y el despliegue de soluciones efectivas, incluidas medidas comerciales apropiadas, para preservar las industrias críticas de ambas economías.

De esta manera y para garantizar el entorno más constructivo para estos esfuerzos conjuntos, acordaron evitar cambios sobre estas cuestiones que afecten negativamente el comercio bilateral y se comprometieron a entablar rápidamente negociaciones para encontrar soluciones antes de fin de año y fortalecer la alianza democrática entre ambos socios.

En este sentido, las partes reconocieron el impacto en sus industrias derivado del exceso de capacidad global impulsado en gran parte por terceros, advirtiendo de que las distorsiones que resultan de esta circunstancia «representan una seria amenaza para las industrias del acero y el aluminio de la UE y los EEUU».

De este modo, dado que EEUU y los Estados miembros de la UE son aliados y socios y comparten intereses de seguridad nacional similares a los de las economías de mercado democráticas, estuvieron de acuerdo en que pueden asociarse para promover altos estándares, abordar preocupaciones compartidas y hacer rendir cuentas a países como China, que apoyan políticas que distorsionan el comercio.

LA UE SUSPENDE NUEVOS ARANCELES.

Con el objetivo de allanar el camino hacia una solución que permita dejar atrás la disputa por la sobreproducción de acero y el intercambio de aranceles, Bruselas ha anunciado este mismo lunes que prevé suspender temporalmente el aumento de los aranceles sobre el acero y el aluminio estadounidenses que debía entrar en vigor el próximo 1 de junio.

«Hemos querido evitar cambios que pudieran tener un impacto negativo en las relaciones», ha indicado en una rueda de prensa la portavoz comunitaria sobre Comercio, Miriam García Ferrer, quien ha precisado que esta medida puede extenderse durante «un máximo de seis meses», pero que el objetivo es llegar a un acuerdo que permita la derogación definitiva de todos los gravámenes que se aplican desde 2018.

El vicepresidente económico y responsable de Comercio en el Ejecutivo comunitario, Valdis Dombrovskis, ha dicho a través de un comunicado que espera que este nuevo diálogo permita lograr un acuerdo «antes de que acabe el año».

También ha querido recalcar que la Unión Europea «no es una amenaza para la seguridad nacional de Estados Unidos», aunque las distorsiones «creadas por el exceso de producción mundial», que achaca principalmente a «terceros países», suponen una amenaza seria para los sectores europeo y estadounidense.