Sacyr ha renovado la verificación de su huella de agua conforme a los requisitos de la norma ISO 14046 con Aenor, que ratifica la información, datos y resultados contenidos en el informe de evaluación de la empresa.
La compañía defiende que en 2022 fue la primera empresa internacional del sector de infraestructuras en verificar su huella de agua, una actuación que abarca todas las actividades del grupo en todo el mundo y considera su huella de agua directa e indirecta (su cadena de valor).
La verificación analiza hasta 18 categorías de impacto según las cuatro metodologías más reconocidas a nivel internacional y cuenta con un enfoque integral, dado que considera todos los impactos sobre los ecosistemas, la salud humana y los recursos relacionados con el agua.
En 2023, Sacyr ha obtenido un resultado más positivo, aumentando la eficiencia en el uso del agua por encima del objetivo previsto para 2025, gracias a las desaladoras que operan a través de su filial Sacyr Agua, que tiene un impacto positivo en zonas marcadas por un elevado estrés hídrico.
«Esta certificación de Aenor pone de manifiesto la importancia de la correcta gestión de los recursos hídricos en las estrategias empresariales para la conservación del valor ambiental y social del agua, un bien escaso e imprescindible para el desarrollo sostenible», ha señalado la compañía, que tiene como objetivo reducir en un 10% su huella de agua hasta 2025.
