Según datos facilitados por la Asociación Nacional de Empresas de Transporte de España, FENADISMER, la Unión Europea aprobó en 2020 el denominado Paquete de Movilidad, que incluye diferentes medidas legales, entre ellas las que se refieren a las modificaciones introducidas al Reglamento sobre tiempos de conducción y descanso y sobre utilización del aparato tacógrafo.
Así, una de las novedades que se incluyó era la referida al nuevo tacógrafo inteligente de segunda generación, que entró en vigor el pasado mes de Agosto, y que permitirá registrar de forma más precisa la posición y labor que realizan los conductores profesionales a fin de poder controlar de forma más adecuada la nueva regulación prevista en el Paquete de Movilidad sobre deslocalización de conductores en transporte internacional (esto es, la regulación sectorial sobre desplazamiento de trabajadores), las nuevas limitaciones a las operaciones de cabotaje así como otras nuevas medidas recogidas en el paquete normativo tendentes a garantizar una competencia más leal entre las empresas.
Además de la obligación de instalarse en todos los vehículos de transporte nuevos que se adquieran desde el pasado 21 de Agosto, con las salvedades establecidas por el régimen excepcional aprobado a finales del pasado mes para solventar la falta de stock de los nuevos aparatos, la reglamentación europea establece un plazo transitorio para la sustitución (retrofit) de los actuales vehículos que vayan equipados con tacógrafos de anterior generación.
Así los vehículos que lleven instalado un tacógrafo analógico o digital no inteligente, esto es, todos los anteriores a junio de 2019, tendrán la obligatoriedad de instalar un tacógrafo inteligente de segunda generación antes de que finalice Diciembre de 2024. Y los vehículos que lleven actualmente instalado un tacógrafo inteligente de primera generación deberán sustituirlo por el de segunda generación antes de Agosto de 2025.
Según los datos oficiales a los que ha tenido acceso FENADISMER, en la actualidad en España la flota total de transporte público por carretera tanto de mercancías como de viajeros que realizan transporte internacional, y en consecuencia afectados por esta nueva regulación, supera los 140.000 vehículos, de los cuales 131.000 son camiones o cabezas tractoras y 11.000 autobuses, los cuales deberán sustituir sus tacógrafos en las fechas señaladas anteriormente, salvo que sean renovados por vehículos nuevos.
A nivel europeo, la estimación es que sean entre 800.000 y 1.000.000 los vehículos de transporte que tengan que realizar el “retrofit” de sus actuales tacógrafos, para lo que los fabricantes de los nuevos tacógrafos inteligentes de segunda generación, deberán incrementar su producción de forma extraordinaria en los próximos meses, como es el caso de Continental, que en la actualidad trabaja a triple turno con una producción semanal superior a los 18.000 nuevos aparatos de control.