El presidente de Mercadona, Juan Roig, se ha mostrado este martes «orgulloso» de los impuestos que paga la cadena de supermercados, en 2020 un total de 1.130 millones de euros (364 millones en Impuesto de Sociedades y 766 a la Seguridad Social). «Si queremos la sanidad universal, la justicia universal y la educación universal, hay que pagar impuestos», ha defendido.
«Otra cosa es cómo se gestionan esos impuestos que pagamos», ha apuntado Roig durante la presentación de resultados de la cadena correspondientes al ejercicio de 2020, un año marcado por la Covid.
Esta crisis sanitaria ha paralizado el turismo, «principal motor de la economía» española, cosa que según augura Roig «nos va a afectar económicamente» y traerá «grandes problemas». En este escenario, el empresario considera que la reactivación económica solo vendrá «si se cuida el espíritu empresarial y la agilización de trámites» por parte en todas las administraciones.
«Como sociedad civil, tenemos que exigir que se agilicen los trámites», ha reivindicado. «Dejemos que los empresarios, , ha insistido.
Roig ha señalado que «por supuesto hay que cumplir las leyes y respetar la reglas del juego» pero cree que se deben agilizar los trámites administrativos.
A Mercadona, la crisis le ha salido «cara», ha admitido Roig, pero aún así no va a pedir ayudas a la Administración y saldrá adelante con sus propios medios, de lo contrario, cree que «la agilidad la pierdes».
En todo caso, Roig reconoce que hay determinados sectores que necesitan ayuda porque han sufrido un verdadero «varapalo». A su juicio, «una sociedad es próspera si tiene más empresarios», ha concluido.
