Estar alerta acerca de los principales síntomas de la alopecia femenina, cómo detectarla y qué tratamientos son los adecuados es algo de vital importancia a la hora de atacar esta alteración de manera exitosa.
La presencia de síntomas como menor densidad del cabello, pelo frágil y quebradizo, presencia de áreas con calvitas en la cabeza, son algunos síntomas que podrían estar indicando el desarrollo de alguna forma de alopecia. Para conocer más sobre esta condición, los especialistas de MC360 comparten algunas orientaciones en su página web.
Alopecia areata: una de las principales formas de alopecia en las mujeres
Existen varias formas de alopecia femenina, y los especialistas de MC360 pueden ayudar a detectarlas. Cada una tiene síntomas propios y por eso se requiere de tratamientos diferentes para atacarlas con éxito. Una de las formas más comunes de esta alteración en la salud del cuero cabelludo es la alopecia areata, una enfermedad autoinmune que se caracteriza por la caída del cabello delimitando pequeñas calvitas de forma redondeada en la cabeza.
Esta forma de alopecia no representa un riesgo para la salud en general, pero sí puede generar un problema a nivel emocional y en la esfera psicosocial de la paciente. Por lo general, se presenta en personas menores de 30 años.
Entre sus condiciones desencadenantes de la alopecia areata se cuentan el estrés, los cambios hormonales y los déficits vitamínicos. Por esta razón, los especialistas recomiendan abordar esta forma de alopecia con tratamientos a base de vitaminas como la mesoterapia capilar o la bioestimulación capilar.
Más variantes de alopecia que pueden afectar a las mujeres
La alopecia frontal fibrosante y la cicatrizal son dos formas de alopecia que también afectan a las mujeres. A diferencia de la alopecia areata no suelen mejorar con tratamientos, y tampoco con injertos capilares. Esto es debido a que la alopecia frontal fibrosante se produce por un trastorno autoinmune que provoca una disminución en el número de folículos pilosos y una reducción permanente de la densidad del cabello en las áreas afectadas.
En el caso de la alopecia cicatrizal, como su nombre lo deja entrever, se produce una alteración en la que los folículos pilosos son reemplazados por tejido cicatrizal lo que hace imposible colocar un implante capilar en la zona afectada.
Otra forma de alopecia que pueden sufrir las mujeres es la androgénica. Esta alteración se presenta con una pérdida de cabello difusa en la parte superior de la cabeza, ocurre de forma gradual haciéndose más evidente en la coronilla y en la línea del cabello. En este caso el injerto de cabello se presenta como una solución a este problema.
Para poder elegir el enfoque terapéutico más adecuado es necesario realizar una serie de pruebas diagnósticas que incluyen un examen tricoscopico y una serie de pruebas complementarias para determinar cuál es el tipo de alopecia que está provocando la caída del cabello. MC360 cuenta con los últimos avances para tratar la alopecia.