El consejo de administración de Atlantia ha convocado una junta general de accionistas para el próximo 28 de mayo, con el propósito de examinar la oferta presentada por el Gobierno italiano junto a los fondos Blackstone y Macquarie para hacerse con ASPI, la sociedad que gestiona sus autopistas en Italia.
En el comunicado difundido por el consejo para anunciar esta decisión, la compañía no hace referencia en ningún momento a la oferta lanzada de forma paralela por la española ACS para hacerse con estos mismos activos por una cantidad simular, en torno a 10.000 millones de euros.
Por ello, la oferta presentada por el Ejecutivo continúa sus trámites y, aunque el consejo deja claro ser el único órgano con competencias para decidir sobre esta operación, quiere conocer la opinión de los accionistas antes de aprobar o rechazar la oferta.
El Gobierno, ahora encabezado por el expresidente del Banco Central Europeo Mario Draghi, ya ha intentando en varias ocasiones en el último año presentar una oferta que se ajuste a los deseos de la familia Benetton, principal accionistas de Atlantia, pero todas han sido rechazadas.
Sin embargo, esta vez, el proceso sigue adelante y el próximo 28 de mayo la junta de accionistas dará su opinión sobre la última oferta presentada, lo que permitirá a los máximos directivos de Atlantia, que controla el 88% de ASPI, tomar una decisión definitiva.
Por su parte, ACS ha escogido a la firma francesa de servicios financieros Société Générale para que le asesore en una potencial operación para adquirir a Atlantia su cartera de autopistas italianas, siempre con el visto bueno del Gobierno italiano. Ambos son socios en el capital de Abertis.
Atlantia emitió un comunicado en el que aseguraba haber tomado en consideración la oferta lanzada por Florentino Pérez. La italiana llegó a un acuerdo con el Gobierno para desprenderse de las autopistas transalpinas tras el derrumbe de un puente en Génova en el verano de 2018.