La llegada de migrantes a la frontera sur estadounidense, puerta de entrada al país para quienes quieren llegar desde México, se ha disparado en el mes de marzo, según el último informe de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos.
Las autoridades estadounidenses han indicado que llegaron a la frontera más de 172.000 migrantes, lo que supone un aumento del 71 por ciento con respecto al mes anterior y uno de los niveles más altos desde hace dos décadas, según la agencia Bloomberg.
Entre los migrantes destaca el alto número de menores no acompañados, concretamente 18.890, que es el doble que el mes de febrero de 2021 y bate el récord mensual tras los 11.861 contabilizados en el mes de mayo de 2019.
Asimismo, el informe ha precisado que «la mayoría de los migrantes que intentan pasar la frontera suroeste siguen siendo adultos solteros», de los cuales 103.900 fueron expulsados en el mes de marzo.
En las últimas semanas, varios medios estadounidenses han accedido a informes gubernamentales sobre las cifras de menores migrantes no acompañados que custodia Estados Unidos. Este jueves, la Administración estadounidense ha indicado el récord de un total de 20.273, de los cuales unos 4.200 se encuentran en la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza y más de 16.000 bajo el cuidado del Departamento de Salud y Servicios Humanos, según CNN.
El Gobierno de Joe Biden ha achacado este incremento a una tendencia estacional y «a razones que incluyen violencia, desastres naturales, inseguridad alimentaria y pobreza en México y los países del Triángulo Norte de Centroamérica», según el comunicado presentado por la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos.
Sin embargo, los republicanos han criticado que este aumento se debe a los cambios en las políticas migratorias propuestas por Biden desde su llegada a la Casa Blanca.
