Las pruebas de acceso a la universidad (PAU) en Catalunya han comenzado este miércoles con el examen de Castellano y la novedad de un código de conducta de las personas participantes en la organización de la Selectividad, que deben «guiar su actuación profesional con vocación de servicio, profesionalidad y confianza pública».
La presidenta de uno de los tribunales en el Campus Ciutadella de la Universitat Pompeu Fabra (UPF), Rosa Cererols, ha dicho que este año se dispone de un código de conducta a raíz del caso del profesor de la Universitat Autònoma de Barcelona (UAB) vinculado a la organización de la Selectividad y que fue apartado por presuntos abusos sexuales a alumnos.
Este código define «cómo se deben comportar» y cómo se deben dirigir a los alumnos en el aula y que antes de comenzar los exámenes el personal de organización debe leérselo.
El documento, consultado por Europa Press, pide a las personas participantes en la organización de las PAU que deben desarrollar sus funciones con «corrección, profesionalidad, honestidad, imparcialidad, diligencia, buena fe y neutralidad política e ideológica, y priorizando el respeto a las personas y sus derechos».
También les insta a actuar desde el respeto a la diversidad y sin discriminación y a «velar por la prevención de cualquier forma de acoso psicológico, acoso laboral, acoso sexual o por razón de sexo o de orientación sexual, de expresión o identidad de género», y tener una actitud diligente cuando se detecte un caso.
Se pide que se relacionen con el equipo de trabajo contribuyendo a un clima favorable; hacer sus funciones con la máxima responsabilidad; «ser responsable en sus manifestaciones públicas, en especial en el uso de las redes sociales y los medios de comunicación»; no invocar su condición de participación en la organización de las pruebas y abstenerse de aceptar regalos.
Al personal se le exige también acceder solo a la información estrictamente necesaria para ejercer sus funciones; ser cuidadoso en la integridad y seguridad de la documentación, hacer un «uso adecuado y responsable de la información a la que haya tenido acceso» así como de los datos personales; mantener el secreto y reserva de la información y la confidencialidad.
INICIO DE LAS PRUEBAS CON «TRANQUILIDAD EXCEPCIONAL»
Rosa Cererols ha afirmado que la gran mayoría de alumnos se han presentado para evaluarse y que en su tribunal no se ha registrado ninguna incidencia y todo ha ido con normalidad y una «tranquilidad casi excepcional, teniendo en cuenta que se viene de pandemia y años muy excepcionales».
Preguntada por los alumnos que han elegido enunciados en castellano ha considerado que «serán pocos» pero que los deben acabar de calcular, y ha asegurado que igual que el año pasado se mantiene el hecho de que los alumnos harán los exámenes siempre en el mismo sitio.
Por último, ha señalado que todos los alumnos tenían conocimiento de las normas para realizar las pruebas y destaca que en la UPF se han presentado 1.200 alumnos a las PAU.
