El Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación se ha comprometido a poner en marcha una estrategia nacional sobre el control población del conejo, según ha informado COAG, que ha alertado de una «situación crítica y desesperante», que está provocando pérdidas al campo de más de 800 millones de euros.
En concreto, la organización agraria ha subrayado que en esta estrategia deberían estar implicados representantes de Agricultura, las comunidades autónomas y las organizaciones profesionales agrarias.
Un compromiso del Departamento que lidera Luis Planas tras la reunión bilateral celebrada entre la Directora General de Producciones y Mercados Agrarios del Ministerio de Agricultura, Esperanza Orellana, y los máximos responsables del Área de Fauna Salvaje de COAG de las regiones más afectadas.
«Hemos trasladado nuestra preocupación porque la situación es crítica y desesperante a pie de campo. La plaga de conejos afecta ya a 1.400 municipios de 10 comunidades autónomas. Más de un millón de hectáreas han sufrido daños y las pérdidas se elevan por encima de los 800 millones de euros», ha subrayado el responsable de Fauna Salvaje de la Comisión Ejecutiva de COAG, Javier Fatás.
Ante la gravedad de esta problemática, agudizada por la sequía, los representantes de COAG han pedido a los responsables del Ministerio «celeridad» para evaluar la situación y en base a ello que se orqueste un paquete de medidas con las soluciones más eficaces.
«Necesitamos una uniformidad de criterios en todo el Estado y que las medidas que ya se están aplicando en infraestructuras públicas para combatir esta plaga se puedan implementar en las explotaciones agrarias», ha apuntado Fatás.
De esta forma, COAG ha recolamado indemnizaciones para los profesionales agrarios cuyas explotaciones se vean afectadas por la presencia de conejos. «El seguro agrario no está siendo una herramienta funcional para indemnizar las pérdidas de producción. Reivindicamos otra fórmula para indemnizar esos daños, como el pago de una indemnizaciones, hasta que no haya un control poblacional efectivo que reduzca la densidad de ejemplares por kilómetro cuadrado», ha recalcado Fatás.