El smart data ha adquirido una enorme trascendencia en el mundo tecnológico, hasta el punto de robarle cierto protagonismo al big data. Este último se refiere al gran volumen de datos a los que puede acceder una empresa; pero la cantidad de información recopilada no basta para marcar la diferencia, sino que también depende de las acciones que cada organización lleva a cabo con ella.
En este sentido, el smart data se basa en el análisis de los datos. De ahí la importancia que adquieren hoy en día compañías como POS Potential, que ayudan a otros negocios a definir estrategias concretas que abarquen toda la cadena de producción, hasta el cliente final.
Relevancia del smart data en los negocios
Las empresas, en los últimos años, han pasado de disponer de poca información sobre sus consumidores a poder consultar una cantidad de datos excesiva. La evolución de internet, así como de los diversos dispositivos y plataformas, ha cambiado los distintos procesos implicados en el sector del gran consumo.
Así surgió el big data, término acuñado al conjunto de datos (estructurados y no estructurados) que, por su gran volumen, requieren sistemas específicos de almacenamiento y procesado para dar paso a un trabajo eficiente.
Inicialmente, este concepto incluía el volumen y velocidad de datos, la veracidad y la variedad de las fuentes (4 V). Sin embargo, la transformación digital y el creciente cambio de los consumidores en sus tendencias introdujo la noción de valor a lo recopilado. De esta manera, emergió el concepto de smart data: una práctica orientada a recopilar y organizar esta información para facilitar una toma de decisiones inteligente. Este análisis permite, por ejemplo, la segmentación de compradores con base en sus preferencias y necesidades, entre otras funcionalidades.
A nivel operacional, POS Potential, con base en cálculos de indicadores potentes y en el conocimiento de sus especialistas en el sector del consumo y el marketing, contribuye a que sus clientes puedan definir cómo, dónde y cuándo implementar distintos planes de acción.
Cómo inciden los datos inteligentes en el revenue growth management
Los inicios del revenue growth management se remontan a la industria aérea de los años 70, y su influencia se amplió al sector hotelero a partir de los 80. Se trata de un proceso de gestión de precios que relaciona la fijación del precio con la previsión de la demanda y el stock disponible del producto o servicio. Con esto se persigue maximizar el beneficio, captando al cliente correcto, en el instante justo y mediante el canal de venta más adecuado.
Es en este reto de combinar la información con una estrategia clara donde el smart data se convierte en una herramienta imprescindible. Su facultad de detectar soluciones a los posibles problemas impulsa su importancia dentro del mundo empresarial.
Es por ello que POS Potential, con el liderazgo de Gilles Dallest como CEO, recomienda la participación activa de un experto en smart data en el proceso de revenue growth management, para que las organizaciones logren superar el desafío de implementar decisiones a través de un mecanismo ágil, rápido y confiable.