Optimi Rooms es el único Hostel cápsula de España. Abrió en Bilbao el año pasado y cuenta con 48 cápsulas, 12 de ellas dobles. Son las más grandes del mercado. Hablamos con uno de sus responsables y probamos una de las cápsulas. Esta fue nuestra experiencia.
En Tokio es algo muy habitual, sobre todo si eres un trabajador oriundo que vive lejos de la capital (algo muy común) y el ir y volver a tu casa te lleva horas. Estamos hablando de dormir en un hotel cápsula, ese alojamiento que suele atraer a turistas que visitan Japón y que es un recurso fácil y económico para los lugareños que como decíamos, no tienen margen de regresar a sus hogares. También, para aquellos que han salido de parranda y van perjudicados, algo también muy común entre el público de estos establecimientos en el país nipón.
Pero esto no es Japón. Y si quieres dormir en un hotel cápsula no es necesario irte tan lejos, como cantaban Los Toreros Muertos. Mucho más cerca, en Bilbao exactamente, abrió en 2019 el primer hotel cápsula de España.
Hemos entrevistado a Iñaki Zabala, uno de los responsables de Optimi Rooms. Sus cápsulas solo comparten con las japonesas el nombre, ya que las de estos emprendedores vascos son mucho más espaciosas (las hay incluso, dobles) y lujosas: colchón viscoelástico, conexión USB, televisión a la carta…
¿Qué funcionalidades tienen vuestras cápsulas comparadas con las de Japón?
Queremos ofrecer más servicios que los que puedes encontrar en una cama de un hostel o de un albergue. Al final esto, siendo un albergue, podríamos decir que es una especie de servicio Premium: el colchón es viscolástico, la almohada es viscolástica, cada cápsula tiene su cierre lo cual es importantísimo, su caja fuerte, enchufe internacional,… Todo esto no lo encuentras en una cama de un hostel.
¿Cómo surgió la idea del proyecto?
De una forma muy particular, viendo un documental de viajes, dijimos “Esto va a acabar llegando no solo a Bilbao sino a todas las ciudades importantes del país. Creímos que era posible haciendo algunas modificaciones: quisimos revisar el concepto de cápsula, ampliándolo. España es un país de servicios, estamos acostumbrados al turismo y no podíamos dar simplemente una cama, tenía que ser una cama con servicio y espacio ampliado.
Qué particularidades tiene vuestro establecimiento en comparación con los de Japón
En los países orientales hemos visto que la cápsula puede ser relativamente bonita pero los espacios comunes suelen ser feos, incluso, grises. Allí se le da importancia a la capsula, pero no a los espacios comunes. En nuestro hotel, desde que entras ves todo poliédrico, blanco.. buscamos esa diferencia en el concepto estético. Estamos en la generación de la fotografía, la gente viene aquí no solo a alojarse sino a vivir una experiencia. Lo de hacer algo moderno, poliédrico, futurista va en consonancia con nuestro concepto de mirar hacia adelante. Lo rústico está fenomenal para quien le guste, pero consideramos que igual en 2020 se imponía algo futurista.
Y no se puede negar que ese aire futurista se respira en los pasillos que albergan las cápsulas, los cuales, iluminados por una luz azul, te hacen sentir como el protagonista de 2001 Odisea en el Espacio. El hotel tiene un total de 48 cápsulas, de las cuales 36 son individuales y 12 dobles.
¿Es el único hotel cápsula de España?
Efectivamante pero habrá más. En los próximos meses tenemos programadas aperturas en ciudades claves. Madrid, Sevilla, Málaga, Valencia..
¿Qué tipo de cliente tenéis?
Muy variado, no solo el típico mochilero, también gente de negocios, gente que viene a visitar la ciudad un fin de semana, parejas que quieren vivir una experiencia diferente … Se suelen quedar 2/3 noches.
¿Viene gente mayor?
Como el concepto de edad es algo más bien interno, claro que viene gente que tiene más años y que quiere vivir la experiencia. Si viene alguien con menor movilidad, le animamos a utilizar la cápsula de abajo, por ejemplo.
¿Habéis tenido casos de claustrofobia?
En siete meses hemos tenido un caso, una chica que era encantadora, y le gustaba mucho el concepto pero no se sentía a gusto en un sitio que tuviera un cierre.
¿Están insonorizadas las cápsulas?
Es una pregunta muy típica. Ten en cuenta que son como literas, camas en habitaciones compartidas. El cierre te da privacidad pero no te aísla del mundo. No son sitios para estar hablando, etc. Los siguientes hostels que montemos tendrán una cápsula nueva, que es totalmente ignífuga y te permite que puedas estar hablando dentro. Es un nuevo modelo que de hecho no ha ni salido al mercado. Son las free noise.
Estos emprendedores invirtieron 400.000 euros en este local (cada cápsula viene a costar unos 1.500 euros). Los precios por alojarse en este establecimiento son muy asequibles: las cápsulas individuales están en 25 euros, y las dobles, 35. Ojo, no admiten niños menores de 10 años: “Como te decía, las cápsulas que de momento tenemos no te aíslan del mundo y si el niño llora, el resto de huéspedes lo oiría, por eso no dejamos”, explica Zabala.
Y, ¿cómo es dormir dentro de una cápsula? La apertura se hace con tarjeta (el hotel dispone de recepción las 24 horas, por si surge cualquier problema). No tuvimos sensación de claustrofobia, dormimos bien, el colchón era cómodo, la temperatura idónea.. ¿La única pega? Se oye el cierre de la cápsula cuando llega otro huésped, algo en lo que ya están trabajando los dueños y que se mejorará en los siguientes locales.
Un último apunte: de cara a la reapertura tras la pandemia, el hotel mantiene las medidas de seguridad dentro del establecimiento (mascarilla y distancia entre personas): “El hecho de que las camas tengan su cierre hace que la percepción de seguridad esté aún más presente y el repunte de reservas tras la reapertura, ha sido llamativo”, finaliza.